27 de noviembre de 1942
Segunda guerra mundial. Las tropas alemanas ocupan la base naval de Tolón (operación Lila), en el Mediterráneo, con la intención de apoderarse de la flota francesa, lo que motiva que el responsable de la misma, el conde y almirante Jean de Laborde, ordene su destrucción antes que su entrega. Tres acorazados, siete cruceros y doce submarinos son incendiados y hundidos por sus propias tripulaciones.