14 de abril de 1865
Cinco días después del fin de la guerra de secesión, y mientras asistía a la representación de la comedia Nuestro primo americano, de Tom Taylor, en el teatro Ford Opera House de Washington, el presidente de los EE.UU., Abraham Lincoln, es herido mortalmente por el actor y fanático sudista John Wilkes Booth, que le dispara en la nuca. El crimen forma parte de una conjura urdida por un grupo aislado de partidarios de la Confederación que también ha planeado asesinar al vicepresidente de la nación, Andrew Johnson, y al secretario de Estado, William Seward, sin lograrlo en ninguno de ambos casos. Lincoln fallecerá al día siguiente.