21 de julio de 1348
Las fuerzas que dirigen Lope de Luna y Pedro IV el Ceremonioso, rey de Aragón, derrotan en la localidad zaragozana de Épila a las tropas de la Unión aragonesa, comandadas por Juan Ximénez de Urrea, señor de Biota, que perece en el combate. El resultado de la batalla significará la revocación por parte del monarca de todos los privilegios y derechos de la Unión, compuesta por nobles del reino.