22 de noviembre de 1977
Tras ser abolido por la Corte Suprema de los Estados Unidos el veto del Congreso norteamericano a los vuelos del Concorde a aeropuertos estadounidenses, debido a las protestas por el exceso de ruido y al control que dicho aparato ejercería sobre las rutas transoceánicas, el mencionado avión comercial supersónico efectua el primer vuelo entre París y Nueva York, invirtiendo tres horas y media en el trayecto.